En los últimos años, los estudios de mama han ido en aumento, principalmente en el área de la ultrasonografía
Los modernos adelantos tecnológicos, nos han permitido obtener imágenes de alta resolución y de una excelente calidad.
En la actualidad, es posible obtener imágenes ecográficas, de una región específica de la glándula mamaria y, si lo que se desea es evaluar la mama en su totalidad, esto también es posible y sin emitir una sola radiación; además, no existen contraindicaciones, ni limitaciones para realizarse este estudio.
Anteriormente, uno de los estudios realizados con mayor frecuencia en el campo de la patología mamaria, era la mastografía. Sin embargo, está última tiene indicaciones específicas y, una de ellas, es que sólo es recomendable en mujeres mayores de 40 años. Por otra parte, si bien es un estudio radiológico que emite una dosis mínima de radiación; el problema que persiste, es la molestia dolorosa, de la que se quejan muchas mujeres, lo que ocasiona que una gran parte de ellas evadan el realizárselo como screening (programas detección anual oportuna del cáncer mamario). Este hecho adquiere un mayor sentido, si consideramos que un buen número de padecimientos de mama cursan con dolor y, en la mastografía, se requiere hacer compresión del tejido. En esta técnica diagnóstica, también existen importantes avances, como lo es la mastografía digital.
Con el comentario anterior, no quiero decir que la mastografía sea un estudio que no deba practicarse. Debido a que, en mi opinión, en la actualidad mastografía y ultrasonido mamario, son procedimientos diagnósticos, que siempre deben correlacionarse en la patología de la glándula mamaria; ya que, constituyen un apoyo y son complementarios en el diagnóstico.
El modo de actuar del ultrasonido es mediante la emisión de ondas sonoras de muy alta frecuencia, mismas que no son percibidas por el oído humano. Es por esta razón, que en el embarazo, sigue siendo uno de los estudios de gabinete de mayor utilidad y sin repercusiones para el bebé. Estos sonidos de alta frecuencia, son modificados por un transductor (dispositivo con el que se explora la mama o cualquier otra región que se desee investigar), y transmitidos al equipo de ultrasonido, en donde, por medio de un sistema piezoeléctrico, forma las imágenes que aparecen en el monitor y, de esta manera, es posible distingur entre tejido sano y una lesión.
Es importante considerar, que uno de los padecimientos que ha ido en aumento constante en los últimos tiempos, es el cáncer. En particular, el cáncer de mama, es uno de los más frecuentes en los Estados Unidos de Norteamérica y también en México: ha desplazado, en orden de frecuencia, al cáncer cérvico-uterino o de la matríz. Esto último, obedece en gran medida, a la difusión que han tenido los programas sociales masivos de prevención, dirigidos a la población vulnerable, recomendando la realización anual de un estudio citológico, utilizando la técnica de Papanicolaou, lo que permite detectar la enfermedad a tiempo y brindar un tratamiento más efectivo.
Es por esta razón, que quiero hacer mucho énfasis e insistir, en la necesidad de realizarse una auto-exploración mamaria y, ante la presencia de cualquier nódulo o tumoración que se palpe, acudir de inmediato a una valoración médica.
Esta es la mejor manera de prevenir. Otro de los mensajes que quiero transmitir a través de este artículo, es la necesidad de llevar una alimentación sana, que incluya una buena cantidad de agua, frutas y verduras; así como, el evitar el consumo de alcohol, drogas, tabaco y practicar algún ejercicio en forma regular. Ésta es la mejor manera de prevención de cualquier enfermedad y, por supuesto el ser feliz en el entorno en donde se vive.
Para poder emitir un diagnóstico y un pronóstico de cualquier lesión; así como para establecer un tratamiento adecuado, el Colegio Americano de Radiología, ha establecido la clasificación de BIRADS (Breast Imaging Report and Database System). De esta manera, es posible estandarizar y mejorar los estudios mamográficos y hacer un análisis de los datos obtenidos que permiten unificar criterios en cualquier país, de acuerdo a la siguiente categorización:
BI-RADS 0: Requiere evaluación adicional
BI-RADS 1: Negativa
BI-RADS 2: Benigna
BI-RADS 3: Probablemente benigna
BI-RADS 4: Anormalidad sospechosa
BI-RADS 5: Altamente sugestiva de malignidad
BI-RADS 6: Malignidad conocida
De esta manera, como se puede apreciar, el tener y utilizar una misma clasificación de alguna lesión presente en la GLANDULA MAMARIA, evita la confusión, aún entre los propios médicos.
En las siguientes imágenes de ultrasonido, se puede apreciar, desde una imagen totalmente benigna a una maligna.
Quiste típico: se observan sus paredes delgadas, bien definidas y sin imágenes en su interior, por lo que lo podemos clasificar en un BIRADS 2.
Fibroadenoma: esta imagen es totalmente redonda sus bordes bien definidos, sin embargo, su interior se observa como si fuera más sólido. El fibroadenoma, es una lesión benigna sin embargo se clasifica dentro de un BIRADS 3.
Cáncer invasor: es una lesión que tiene bordes irregulares, un crecimiento muy desordenado y en el cual se observan sombras en su interior. Sugestiva de un BIRADS 5.
Espero que esta información les sirva para entender más la importancia y diagnóstico del estudio de ultrasonido en mama. Agradezco al IMIGIO por su invitación, les deseo un feliz año, en horabuena.
Cualquier duda, mi correo electrónico es: This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Dr. Juan Manuel Badillo Glez.
Médico Cirujano. UNAM.
Ultrasonografista.
Instituto Mexicano de Dianóstico por Imágen
BIBLIOGRAFIA
- Imágenes: Helmut Madjar. Pg.63
Fuente: Revista Enlace Inmunológico. IMIGIO A.C.